- ½ kg. de almejas[1],
 - 4 dientes de ajo,
 - 1 puñado de perejil picado
 - ½ vaso de vino blanco
 - ½ vaso de agua
 - 1 cucharada rasa de harina
 - sal y dos cucharadas de aceite de oliva.
 
- Deja las almejas dos horas como mínimo en abundante agua con sal, para que suelten la arena.
 - En una sartén, echa el aceite, los ajos pelados y picados, deja hacer 1 minuto, sin que los ajos se pongan marrones. Añade las almejas, lavadas. Y el perejil picado.
 - Mueve con una cuchara de madera, añade la cuchara de harina y el vino blanco. Remueve hasta que se vayan abriendo, y por último échale el agua.
 - Deja cocer hasta que se abran todas.
 
[1] La almeja tiene propiedades antioxidantes para nuestro organismo. Es rica en vitamina B12 –cobalamina–. Esta vitamina hidrosoluble resulta esencial para un adecuado funcionamiento celular, la formación de glóbulos rojos y la regeneración de los tejidos.
1 comentario:
Ya era hora... echaba en falta unas almejitas.
Estas en concreto están realmente ricas, las prefiero grandes porque tienen más sabor, y la misma receta con coquinas también está genial.
Sin duda tres estrellitas de recomendación.
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