Después de trabajar toda la semana y casi todo el fin de semana, llegó la hora de cenar, y Manuel me sorprendió con un invento de tortilla. Estaba buena, una mezcla de sabores que nunca antes había probado, pero reconozco que era original. Os la pongo aquí.
Ingredientes:
- Un bollo de pan,
- dos huevos,
- una loncha de queso,
- dos espárragos blancos de lata,
- un puñado de bacon en trocitos,
- un chorreoncito de aceite de oliva y un poquito de sal
Preparación:
- Bate los dos huevos con un tenedor en un cuenco hondo, añade el poquito de sal,
- Corta los dos espárragos al tamaño que te guste, con unas tijeras de cocina,
- Trocea el queso en lonchas,
- Echa el puñado de bacon ya cortado,
- Remueve bien,
- En una sartén pequeñita pon unas gotas de aceite de oliva, espera a que se ponga caliente,
- Echa la masa y con ayuda de una cuchara de madera, remueve un poco para que se vaya cociendo por todas partes. Haz la forma de la tortilla y deja que se vaya haciendo dando la vuelta hasta que esté dorada,
- Da la vuelta, ayudándote con un plato del tamaño de la sartén, o una tapadera, con cuidado, porque las tortillas que se hacen con espárragos y queso se suelen pegar un poco,
- Cuando esté doradita por el otro lado, saca y coloca entre el bollo de pan cortado por la mitad,
- Puedes echarle un poquito de tomate frito o ketchup.
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