CALDILLO DE PINTARROJA

Este plato es típico de las zonas donde hay mar. Lo tomaban por las mañanas temprano los pescadores, los hombres de la mar, para quitarse el frío. Solía ir bastante picante, y una vez servido le añadían un poco de vino de aguja, jerez o similar. Se sirve en tazones, con los tropezones del pescado y las almejas.

Esta receta que os dejo aquí, me la facilitó mi cuñado Fernando, un gran conocedor de la cocina malagueña, y muy buen cocinero. He seguido sus instrucciones y me ha salido un caldo muy sabroso.

Ingredientes:

• Una pintarroja,
• cincuenta gramos de almendras (unas 50 aproximadamente)
• una rebanada de pan cateto, a ser posible,
• seis dientes de ajo,
• 250 gramos de almejas,
• media cucharadita de comino,
• un tomate colorado pequeño
• una pizca de orégano,
• una cucharadita de azafrán molido,
• un poco de sal, y dos cucharadas de aceite de oliva.

Preparación:

• En una cacerola pon litro y medio de agua, con la pintarroja cortada a trocitos y las almejas.
• Deja hervir.
• Fríe en una sartén, con el aceite, los ajos, las almendras, el pan y el tomate.
• Cuando esté a punto para sacarlo, echa el comino y el azafrán, y remueve.
• Échalo en la batidora con un poco de caldo del que estás cociendo.
• Añade a la cacerola, con la mitad de una guindilla picante.
• Deja hervir unos 20 minutos. Saca la guindilla.
• El punto de picante ya es a vuestro criterio.
• Sirve bien caliente.

La pintarroja es el tiburón más abundante del Cantábrico. Totalmente inofensivo. Su carne es muy sabrosa, aunque no suele ser comida fuera de las poblaciones del litoral. De unos 70 centrímetros, de color amarillento, pardo, con puntos negros numerosos y de pequeño tamaño. De ahí su nombre de pintarroja. De bajo coste económico, es un plato muy apreciado en los días de invierno.