Ingredientes:
- Un kilo de patatas,
- dos cebollas,
- un vaso de nata líquida,
- Ochenta gramos de mantequilla,
- Ochenta gramos de queso emmental rallado,
- una cucharadita de tomillo,
- sal y pimienta,
- Pela las patatas, las cortas en rodajas muy finitas y las echas en bol con agua fría, para que no se pongan negras,
- Escurre y cuece en agua con sal hirviendo, durante unos cinco minutos,
- Pela las cebollas y corta en rodajas finas, escáldalas durante dos minutos en agua hirviendo, escurre y seca con un papel de cocina. Reserva.
- Unta una fuente de horno con mantequilla.
- Pon en el fonde una capa de patatas y encina una de cebollas; espolvorea con un poco de queso, tomillo, sal y pimienta.
- Cubre con un poco de nata y mantequilla,
- Pon otra capa de patatas y cebollas, aliñando con el queso, tomillo, sal y pimienta de nuevo.
- Termina con una capa de patatas. Cubre con la nata restante y mantequilla y mete en el horno, precalentado a 190º. Déjalo en el horno durante una hora.
- Cinco minutos antes, pon el gratinador, cubre con queso rallado y gratina. Sirve caliente.
La patata es uno de los alimentos básicos de nuestra alimentación. Es versátil, sana y económica, sobre todo si se cocina así, al horno, ya que se evita el exceso de grasa. Aporta mucha energía, recomendable para deportistas.
1 comentario:
un plato sencillo de haer y con muy buena pinta. Cambia lo tradicional. Me gusta como pones las recetas, cómo las explicas. He hecho alguna ue otra comida de tu blog y ha salido muy bien. Seguire visitando tu espacio, y agradecerte que estes ahi todos los dias compartiendo estos platos, por que nos dan ideas. Felicidades.
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