Quienes ya me conocéis a través de mi blog y del facebook, o en persona, en las distancias más cortas, sabéis que últimamente estoy disfrutando mucho con el chocolate. ¡A ver, que sí, que me conocéis, que sabéis que hablo de chocolate dulce, de ése que le gusta tanto a los niños y niñas, ése que comerlo es "casi un pecado", porque a veces se come a escondidas. De ése que en ocasiones es un premio, y otras se convierte en un castigo.
El chocolate del que se han escrito libros, y libros, y se han hecho películas, y se utiliza como regalo en ocasiones especiales...
Pues trabajar con él, derretirlo, volverlo a solidificar, hacer formas con él, conseguir sabores distintos, mezclar ingredientes, olerlo... Eso es lo que me gusta. Disfruto con él. Me relajo con él.
Y rebuscando entre mis muebles de cocina, cajones y algún que otro escondite que no recordaba, he ido sacando todos los moldes de los que dispongo para hacer piruletas y bombones. Son más de 55.
Y de los que estoy más orgullosa (y no es por hacerle publicidad) es de los de silicona de la marca
Silikomart. ¡Si es que tengo un montón! ¡Quedan tan bonitos los bombones con estos moldes y salen tan perfectos!
La última adquisición la encontré en mi tienda favorita,
La casita dulce de las flores, y fue un flechazo entre ambos. ¡Un molde para hacer turrones! ¡Cuánto tiempo llevaba esperando algo así!
Y fue llegar a casa, y hacer un turrón. No me pude aguantar. Aquí lo tenéis por si queréis verlo, mi
TURRÓN BORRACHO.
Ahora os dejo con otro turrón, del que ya he hecho en tres ocasiones. La primera vez de muestra, y las otras dos, mejorando.
Ingredientes:
- 200 gramos de chocolate blanco,
- 200 gramos de chocolate negro o con leche,
- 50 gramos de manteca de cerdo,
- 60 gramos de almendras picadas, no molidas,
- 2 bizcotelas o bizcochos de soletilla,
- Unas gotas de brandy (opcional).
Preparación:
1.- Corta en trocitos muy pequeños el chocolate.
2.- Derrite 120 gramos de chocolate blanco al baño maría, y cuando esté casi derretido, echa el chocolate restante, y fuera del fuego remueve.
Derretir el chocolate en dos veces, es para atemperarlo.
Es una forma muy casera de hacerlo. Lo suyo es atemperarlo buscando las temperaturas correctas, pero para hacerlo más fácil, ésta es una forma rápida y que da buenos resultados.
El chocolate queda con brillo después de desmoldarlo.
3.- Vuelve a poner en el fuego, y deja unos segundos, hasta que esté derretido del todo.
4.- Con el chocolate oscuro no hace falta hacerlo, ya que va debajo y no se verá.
5.- Añade 30 gramos de las almendras troceadas y un bizcocho de soletilla desmenuzado.
6.- Derrite una cucharadita de chocolate con leche o negro, y echa en el preparado anterior.
Remueve muy ligeramente, para que se produzca el efecto marmoleado o jaspeado.
7.- Vuelca sobre un molde. Si no tienes molde especial, puedes preparar uno en casa con un tetrabrick, cortado por la mitad, y forrado con papel de horno, o con film transparente, o con una fiambrera.
8.- Deja enfriar una hora aproximadamente.
9.- Mientras derrite el chocolate negro y agrega la manteca de cerdo.
10.- Cuando esté derretido, los 30 g. de almendras y el bizcocho, remueve. Y finalmente, una cucharadita de chocolate blanco para conseguir el mismo efecto marmoleado.
11.- Deja que enfríe un poco y vuelca sobre el chocolate blanco. Deja reposar de 2 a 3 horas, y ya estará listo para desmoldar y disfrutar de él. Si quieres, puedes echarle al chocolate negro unas gotas de brandy, o ron. Le da un sabor distinto.
Y ahora una sorpresita.
La casa
SILIKOMART, viendo que tenía muchos de sus moldes, y que me gustaban tanto, me propuso un reto: hacer una de sus creaciones, que yo no conocía, y que desde que la ví, me encantó.
Preparar un árbol de Navidad con uno de sus últimos y más espectaculares moldes.
En cuanto me hicieron esta propuesta, yo me volví loca. Sí, porque me gustan los retos.
Y nada mas recibir el paquete, a pesar de estar medio dormida, cansada de un día ajetreado de trabajo, abrí la caja con nerviosismo, compré el chocolate que me faltaba y me metí en la cocina a preparar un "bombón especial".
Mi gata también se volvió un poco loca, y mientras olisqueaba todos los papeles, cartones, tiras de plástico, etc... correteaba alrededor de la caja, hasta que al quedarse vacía se metió dentro. La caja venía desde Italia ni más ni menos. Lía era feliz dentro de ella, asomando la cabeza entre una de las tapas de cartón...
¿qué os parece? ¿A que es ideal?
Y todavía me queda otro molde que estrenar, pero ése tengo que dejarlo para otro día con más tiempo, y más paciencia. Pero cuando lo utilice, va a ser una "¡bomba!".
¡gracias Silikomart por hacer estos moldes tan bonitos! Gracias por dejar que por un instante, por una insignificancia como ésta (comparándola con la vida misma) seamos un poquito más felices. Gracias también, porque con vuestros moldes, podemos preparar regalos y hacer felices a otras personas.
Ya tengo a mi cuñado preparándome soportes de madera, para poder hacer muchos arbolitos y regalarlos. Me estoy imaginando las caritas de los niños y niñas en la cena de Nochebuena, que este año va a reunir a una familia muy numerosa.
Acercaros a ver la página de silikomart, una empresa joven y dinámica, con unos productos muy buenos.
Os sorprenderá todo lo que tiene, al igual que me sorprendí yo misma de la cantidad de moldes y utensilios de cocina de los que disponen, y de muy buena calidad, que tengo algunos desde hace años y están como nuevos.
Y eso es todo por hoy.