Lo de la reunión pipirranera os sonará un poco raro, lo sé. Os cuento rápidamente, para no aburrir al personal: Somos un grupo de amigos y amigas que nos gusta mucho la cocina, y tenemos blogs. En realidad la mayoría nos conocimos a partir de tener los blogs. Nos faltaba Olimpia, pero acaba de crear uno hace muy poquito. Podéis verlo en La Alacena de las Miguelitas.
Buscando nombre, y por votación casi unánime decidimos que nuestro grupo se llamara PIPIRRANA. Este tipo de ensalada confeccionada con tomate, cebolla,pimiento verde, huevo cocido y algún pescado (como atún) es un plato típico de varias provincias de Andalucía: Jaén, Granada, Málaga, cada una con sus variantes; y nos gustó. Una combinación de diferentes productos, colores, sabores... y una mezcla fresquita, sencilla y sabrosa. Productos que juntos son bien avenidos. Como nosotros.
Pues el año pasado, por estas fechas, decidimos reunirnos para hacer dulces de Navidad, recordando así a nuestras abuelas, a nuestras familias, cuando se reunían y preparaban dulces para todas las fiestas, y para toda la familia.
Y nos gustó tanto la experiencia, que este año hemos repetido, y esperamos que se convierta en una costumbre navideña, y que cuando la "familia", nuestra familia pipirranera crezca, siga haciendo estas reuniones. Ya tenemos dos miembros nuevos en el grupo, dos pequeñas de pocos meses.
Está nuestro querido Miguel Ángel, Olimpia que tiene 6 meses, y ahora Lola, de tan sólo 2 meses. ¡bienvenidas!
Este viernes pasado fue la reunión, y pasamos una tarde muy agradable, y muy movidita: masa para un lado, masa para otro, el olorcito a anís, a vainilla, a almendras... Un trocito de turrón de chocolate en una mesa, un bombón tipo "ferrero rocher" por otra; y mantecados, borrachuelos y cuernecitos por toda la casa.
Felicitar, en primer lugar, a Laurita que con la generosidad, amabilidad y cariño que la caracterizan, nos cedió su cocina y su casa para reunirnos. Nos ofreció su hospitalidad, y estuvo pendiente en cada momento de todo. Controlando que no faltara nada, que lo encontráramos todo, que estuviéramos a gusto.
¡Es un cielo! Gracias, guapetona.
Y a todos los demás: Ceci, Conchi, Concha, Reme, Rafa, Eli, Olimpia, Maribel, Leo, la madre de Laurita que trabajó como la que más, muy entusiasmada, porque dice que su abuela también hacía muchos dulces para Navidad, y que esta reunión le recordaba esos días pasados.
Las recetas de cómo los hicimos, están sacadas de las autoras de las mismas y están en sus blogs. En cada uno de los títulos, en el nombre de la autora y nombre del blog, está el enlace para entrar en la receta original. Os recomiendo que entréis, porque a estas horas, y con una pastillita para el dolor del cuello que me ha dejado medio croquis, lo mismo ya no sé si lo he escrito bien.
Creo que sí, pero por si acaso, mejor consulta con las maestras.
CUERNECILLOS DE VAINILLA: De Leoletta, del blog En Cocinaando.
1.- EScalda. Pela, seca y muele las almendras.. 2.- Tamiza la harina y echa las almendras, el azúcar, la sal, la mantequilla fría, la esencia de vainilla y las yemas de huevo. 3.- Amasa todo hasta que quede bien mezclados los ingredientes. 4.- Prepara una bola, envuelve en papel de aluminio, y deja en el frigorífico 2 horas aproximadamente. 5.- Saca la masa, Corta y forma tiras de dos ctm. de ancho, y ahora corta los trocitos regulares y con los dedos haz la forma del cuernecillo, más ancho por el centro, más estrechos los lados. 6.- Precalienta el horno a 190º y hornea durante 15 minutos, o hasta que empiecen a dorarse. NO lo dejes muy tostadas, porque si no quedan demasiado crujientes. Lo bueno, según Leo es que estén crujientes por fuera, tiernos por dentro. 7.- Mezcla azúcar glas y el azúcar avainillado, y cuando saques los cuernecillos del horno, los pasas por esta mezcla y los dejas reposar.
¡¡Están deliciosos y no es por pelotear!! Gracias Leo por traerlos el año pasado y presentárnoslos formalmente. Nos has enamorado con ellos
1.- Pon el aceite de oliva y la cáscara de limón en un cacito para que se caliente y coja el saborcito del limón. 2.- Cuando esté dorada la cáscara, retira y echa el ajonjolí y anís en grano.Aparta y deja enfriar. 3.- En un bol grande echa la harina, y añade los líquidos (vinos y zumo). 4.- Mezcla con una cuchara de madera y finalmente echa el aceite con las semillas. Remueve con la cuchara, cuando no puedas más, amasa con las manos. 5.- Amasa hasta que se despegue de las paredes del cacharro y de las manos. 6.- Tapa con un paño y deja reposar 1/2 hora. Mientras puedes ir recogiendo y preparando el siguiente paso. 7.- Estira la masa, no demasiado gruesa, corta bolitas y haz la forma con un rodillo para borrachuelos. En el centro puedes poner cabello de ángel, una crema dulce de calabaza, o chocolate... Cierra y pega bien los bordes para que al freirlos no se salga el relleno. 8.- Echa el aceite preparado para freír, con la cáscara de la naranja. Cuando tome color dorado, saca y empieza a echar los borrachuelos. Ve removiendo y dando la vuelta hasta que estén bien dorados, a fuego medio-fuerte. 9.- Saca y deja que escurran sobre papel absorbente (Reme lo pone sobre un escurridor y papel), y reboza en azúcar.
Particularmente, a mí me gustan más los borrachuelos sin rellenar, y de un día para otro. Si sobran, los dejas en una lata y se conservan varios días.
Reme y yo, con las manos y la masa, y yo con una cara de pánfila... jajaja, aunque más bien, la cara de foto que no quiero reir para que no se me vean los dientes, pero tampoco quiero tener la boca cerrada con sonrisa forzada, y al final sale esto, que ni es una cosa ni otra, pero no sé qué cara es...jajajajaj
MANTECADOS: Reme, alsurdelsur
1.- Lo primero y primordial, es secar la harina. Reme dice que tostarla no, SECARLA. ¡¡iMPORTANTE!! Deja en bandeja de horno a 100º durante 70 m., removiendo cada 15 m. para que se seque y no tome color. Si luego pesas la harina, y pesa menos, no pasa nada. ES que ha perdido la humedad. Eso nos pasó a Laurita y a mí mientras preparábamos los ingredientes, y nos asustó un poco al principio. 2.- Tuesta las almendras en una sartén con cuidado que no se tuesten demasiado, si no, amargan. Retira y añade el trocito de canela en rama. Deja enfriar. Ralla todo junto. 3.- Separa unos 20 g. de harina y reserva. 4.- En un bol pon la manteca de cerdo, el azúcar glas y mezcla hasta que la masa esté suave. 5.- Echa la harina, donde habrás rallado un poco de nuez moscada; y los demás y mezcla bien hasta que la masa se despegue del bol. 6.- Espolvorea de harina la mesa de trabajo, y extiende la masa con un rodillo a un ctm. o dos de grosor, Corta con un cortador y ponlo en la bandeja. Nosotros el viernes pusimos una capa doble. Quedaron muy chulos. 7.- Ponlos sobre una bandeja de horno, enciende sólo la parte de arriba. Pinta con yema de huevo y adorna con ajonjolí. Deja en el horno 5 minutos nada más.
Cuando los saques del horno, es preferible que los dejes enfriar bien, porque así endurecen y puedes manejarlos mejor. Si no, corres el riesgo que se te desmenucen.
Nuestra querida Ceci, del blog Harina "la carmita", que vino por primera vez a nuestro grupo y nuestras reuniones, se BAUTIZÓ bien, porque no paró de trabajar, de amasar, de freir, de cortar, de FREGAR, de secar, y hasta de recortar etiquetas para ponérselas a los mantecados. Yo la voy a invitar un día de estos, así, desinteresadamente, a tomar un tesecito con unas pastas... A ver si quiere, pero tiene que ser antes de que lea esto, que si no puede sospechar que voy con doble intención...
Unas fotos de la reunión:
Algunos momentos de la tarde , curso taller, reunión, master card, o lo que sea. Conchi y Leo con los cuernecillos: Reme y Conchi con los mantecados dobles, antes de meterlos al horno.