MERLUZA CON SALSA DE TOMATE Y CHAMPIÑONES: SABOR MEDITERRÁNEO EN 20 MINUTOS

 ¿Te ha pasado alguna vez, que llegas tarde del trabajo, cansada o cansado, tienes poco tiempo y en el frigorífico no tienes muchos productos?

Pero tienes un filete de merluza, ¡bien! Procura sacarlo del congelador la noche anterior, eso sí, jajaja. 

Pero no te agobies, esta receta es fácil, ya sabes mi lema, que cocinar bien no significa complicarse la vida. ESta receta es fácil, rápida y sabrosa, que parecerá que has pasado más tiempo en la cocina. Si la usas fresca recién comprada, como si la tenias congelada. En 20 minutos tendrás un plato nutritivo y delicioso. ¡Atrévete a cocinar SIN MIEDO! (ya mi madre me lo decía)

 Ingredientes para Dos Personas:

• 2 Filetes o lomos de merluza (aprox. 150-180g cada uno).

• 1 Vaso (aprox. 150g) de champiñones frescos, laminados.

• 1 Diente de ajo grande.

• $1/4$ de Cebolla o $1/4$ de pimiento rojo pequeño.

• 1 Taza (aprox. 200g) de tomate natural triturado.

• 2 Huevos cocidos (opcional, para un extra de proteína y tradición).

• 1 Cucharadita de orégano seco.

• Un chorrito de vino blanco (opcional).

• Aceite de oliva virgen extra.

• Sal y pimienta negra al gusto.

• Perejil fresco picado para decorar.

Preparación:

1. Prepara la base: en una sartén con aceite, sella a fuego fuerte un poco los filetes de merluza, por la parte de la piel, da la vuelta con cuidad y deja unos segundos. Saca y reserva. Esto es opcional, puedes empezar con el sofrito y añadir la merluza sin pasar antes por la sartén.
2.  Sofríe la base: Añade un poco más de aceite y sofríe el ajo y la cebolla a fuego medio durante unos 3-4 minutos hasta que estén transparentes, pero sin que el ajo se queme.
3. Dora los champiñones: Incorpora los champiñones laminados y sube ligeramente el fuego. Saltéalos hasta que hayan soltado todo el agua y empiecen a dorarse. Este paso es importante para el sabor.
4. Añade el tomate y las hierbas: Vierte los tomates triturados y el orégano. Salpimenta al gusto. Si usas vino blanco, añádelo ahora y espera 2 minutos a que se evapore el alcohol.
5. Crea la salsa: Baja el fuego y deja que la salsa hierva a fuego lento durante unos 5 minutos para que los sabores se mezclen bien.
6. Cocina la merluza: Sazona los filetes de merluza (si no los has puesto antes) y colócalos directamente sobre la salsa de tomate y champiñones.
7. Tapa y finaliza: Tapa la sartén o cazuela y deja cocinar a fuego lento durante 8 a 10 minutos (dependiendo del grosor del pescado). Si la merluza la has pasado anteriormente por la sartén, ese paso se puede reducir a 5 minutos. El pescado estará listo cuando esté opaco y se desmenuce fácilmente con un tenedor.
8. Si ves que te queda la salsa muy seca, añade un poco de agua
9. Sirve: Justo antes de servir, retira la merluza y la salsa al plato. Coloca los huevos cocidos (cortados en rodajas o cuartos) alrededor del pescado y espolvorea abundante perejil fresco picado.

 

Este es un plato ligero y muy nutritivo que sigue la base de la dieta mediterránea:

• Proteína Pura: La merluza aporta proteínas de alto valor biológico, esenciales para el cuerpo, con muy poca grasa.

• Antioxidantes y Fibra: El tomate y los champiñones son ricos en antioxidantes (como el licopeno) y fibra, ayudando a la digestión y la salud cardiovascular.

• Grasas Buenas: Utilizamos aceite de oliva virgen extra, fuente de grasas monoinsaturadas beneficiosas.

LANGOSTINOS CON SALSA DE CÚRCUMA Y JENGIBRE

 

¿Cuántas veces has querido darle un toque exótico a la cena o almuerzo, pero piensas que es demasiado complicado o que el ingrediente principal (esa cúrcuma vibrante) es solo para el arroz? ¡Pues borra esa idea! Hoy vamos a hacer un viaje de sabores sin salir de nuestra cocina, y lo más importante, sin complicarnos la vida.

Esta receta de langostinos  es la prueba de que se puede mezclar el estilo de nuestra casa con los toques vibrantes de Asia. La cúrcuma, el jengibre y la leche de coco se unen en una salsa cremosa y dorada que es pura magia. No tienes que ser un chef para conseguir esta textura sedosa y envolvente. Es la típica receta de 'quedar como una reina o un rey' con muy poco esfuerzo, que te anima a jugar con las especias sin temor. ¡Atrévete a probarla, porque el miedo a lo diferente se queda fuera de esta cocina, ya lo sabes!

Esta receta es para 2 personas y utiliza ingredientes comunes para crear una salsa vibrante y sedosa sin necesidad de nata.

Ingredientes:
- Langostinos Tigre (en este caso) y de la pescadería de mi barrio, AntonioMoyaeHijos	10 unidades	Crudos, pelados, dejando solo la cola.
- Aceite de Oliva (AOVE)	3 Cucharadas	Para saltear.
- Ajo	2 dientes	Picado finamente.
- Jengibre Fresco	1 cucharadita	Rallado o picado muy fino.
- Cúrcuma en polvo	1 cucharadita	Para color y sabor terroso.
- Leche de Coco	150 ml	De lata, idealmente la parte más espesa.
- Miel	1  cucharadita	Para equilibrar el sabor.
- Zumo de Limón o Lima	2  cucharaditas	Para dar brillo.
- perejil o cilantro	Al gusto	Para decorar
- Sal y Pimienta	Al gusto

Preparación (15 Minutos)

1. Pela los langostinos (deja la cola si quieres) la y sécalos bien.

2. Sazona ligeramente con sal y pimienta.

3. Calienta 2 cucharadas de AOVE en una sartén a fuego medio-alto.

4. Cuando esté caliente, añade los langostinos. Saltéalos durante 1.5 a 2 minutos por cada lado. Una vez que estén rosados y opacos, retíralos de la sartén y resérvalos en un plato.

5. Baja el fuego a medio. Si la sartén está seca, añade la otra cucharada de AOVE.

6. Agrega el ajo picado y el jengibre rallado. Sofríe durante 30 segundos, sin que el ajo se dore (aquí hay que hacerlo con cuidado, que el ajo quema pronto y amarga)

7. Añade la cúrcuma y remueve 10 segundos.

8. Vierte la leche de coco y la miel. Lleva a ebullición suave y deja que reduzca un poco (aproximadamente 1 minuto) para que la salsa se espese ligeramente.

9. Retira la sartén del fuego y añade el zumo de limón/lima. Mezcla bien.

10. Vuelve a introducir los langostinos reservados en la sartén. Mueve suavemente para que se impregnen bien con la salsa caliente.

11. Sirve inmediatamente y decora con abundante cilantro fresco picado o perejil.

Para acompañar: Esto quedaría espectacular sobre un poco de arroz basmati o como plato principal con una ensalada de hojas verdes y aguacate. Yo utilicé el basmati salvaje,  salteado con cebolla y champiñones (que me habían sobrado de una comida anterior).

 ¿has visto qué sencillo y rápido de hacer? y el sabor, espectacular...

Sin llegar a ser una receta típica asíática, sí se podría calificar como de "fusión", ya que en vez de utilizar un aceite vegetal utilizamos el AOVE, y hemos utilizado menos especias de las que lleva un típico curry asiático.

 La combinación de leche de coco, cúrcuma y jengibre es la base de muchos platos de curry y salsas en Tailandia, Malasia, Indonesia y en la India.

La cúrcuma se usa en otros lugares, pero es la especia que da el color dorado a muchos currys asiáticos

El jengibre  es un aroma que se utiliza para darle ese toque fresco y picantito, típico también de la cocina asiática. 

¿Te animas a prepararlo?

No tardarás más de 15 minutos.